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A partir del 1 de enero de 2025, entra en vigor la cotización adicional de solidaridad, regulada en el artículo 19 bis de la Ley General de la Seguridad Social (LGSS). Esta medida tiene como objetivo fortalecer la sostenibilidad del sistema de pensiones, complementando el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), mediante una mayor aportación de quienes perciben los salarios más altos. Se aplicará exclusivamente a la parte de los ingresos que supere la base máxima de cotización, estableciendo un nuevo esquema de contribuciones progresivas.
La cotización adicional solidaria introduce nuevos porcentajes progresivos en la nómina de los empleados con ingresos superiores a la base máxima de cotización. Es una medida que refuerza el papel solidario de las contribuciones sociales, asegurando que aquellos con mayores ingresos contribuyan de manera proporcional al sistema de seguridad social.
Importante: Esta medida no afecta a los trabajadores autónomos inscritos en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), quienes están exentos de esta cotización adicional.
Para el próximo año, los porcentajes de cotización serán los siguientes:
Estos porcentajes se aplicarán de manera progresiva, lo que significa que solo la parte del salario que exceda cada tramo será gravada con el porcentaje correspondiente. Esta estructura progresiva está diseñada para minimizar el impacto en los ingresos netos de los trabajadores, mientras se asegura una mayor contribución de aquellos con salarios más altos.
Esta medida incluye una aplicación progresiva hasta 2045, con los siguientes porcentajes finales:
La progresividad de estos porcentajes permite una adaptación gradual tanto para las empresas como para los empleados, facilitando la transición hacia el nuevo sistema de cotización.
Las empresas tendrán que adaptarse a este cambio gestionando los nuevos conceptos económicos en la nómina. Esto implica la creación y gestión de nuevos conceptos de cotización en su solución de nómina, asegurando que se apliquen correctamente los nuevos porcentajes a las partes del salario que correspondan.
Además, deberán informar a la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS) sobre los empleados afectados, las retribuciones y las cuotas correspondientes. Esta comunicación es crucial para asegurar que las cotizaciones se registren correctamente y que los empleados reciban los beneficios correspondientes en el futuro.
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